A través de la historia el hombre a tenido fantasías sobre su sexualidad practicada en grupo, o al menos con diferentes personas. En la antigua Grecia, pasando por los romanos y los egipcios, la era de los T´ang y muchas otras civilizaciones, este tipo de sexualidad parece haber sido practicada por diferentes pueblos.
Los esquimales, los chinos, los chuckchees del norte de Asia, los hawaianos, los tibetanos, los africanos, los alemanes y otros mas en un momento dado han practicado el intercambio de parejas durante muchos años.
Lo que parece retener al ser humano para practicar el intercambio en una escala mayor, es la religión, la educación la moral de la sociedad y los valores personales adquiridos.
En nuestra sociedad norteamericana y mas particularmente en la sociedad quebequence, este estilo de vida libertino es cada día mas aceptado. Las parejas que se involucran en esta practica son personas entre los 30 y 40 años, han sido menos influenciados por la religión y de una moral represiva que sus predecesores.
La sexualidad ha venido siendo menos tabú, muchas parejas, después de haber explorado la felicidad del descubrimiento del cuerpo del otro, deciden vivir experiencias sensuales con otras personas.
Grandes personajes han marcado la historia sexual del hombre;
EL emperador Tibere, el Márquez de Sade, la emperatriz Wu Hu de la era de T´ang,
Cleopatra, Pablo Picazo, Guy de Maupassant son solo algunos ejemplos.
La mayoría de los países industrializados cuentan con una asociación de personas que practican el intercambio sexual. En Québec, tenemos un cierto retrazo por ese lado. Menciono que tenemos cierta visibilidad desde hace algún tiempo.
Jean Hamel, presidente
Octubre 2001
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